CIUDADELA.- En Menorca hay 5.201 viviendas vacías. Es lo que dicen las últimas
cifras difundidas por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que
ponen de manifiesto que durante la última década, la Isla ha ganado
pisos sin ocupar pero en cambio ha perdido segundas residencias.
Respecto
a los pisos vacíos, el incremento en esta década ha sido del 1 por
ciento (teniendo en cuenta que al no disponer de los últimos datos de Es
Migjorn Gran, las cifras de este municipio no constan en los datos
globales de Menorca). Los datos, de finales del año 2011, sitúan a
Ciutadella como el municipio con más viviendas vacías. En diez años se
ha doblado su número, superando ya las 2.000. Ferreries, Sant Lluís y
Alaior también incrementan su parque de viviendas sin inquilinos,
mientras que Maó y sobre todo Es Castell y Es Mercadal registran una
tendencia a la baja.
Sobre los casos de Es Castell y Es
Mercadal, el agente inmobiliario Joan Torres explica que “se habían
realizado bastantes promociones en estos dos municipios, y durante esta
década han tenido que adaptar sus precios a la nueva situación económica
y esto ha hecho que se pudieran vender con más facilidad”. En relación a
Ciutadella, el experto entiende que el volumen de construcción durante
el boom inmobiliario ha sido muy elevado, y en este caso el ritmo de
ventas es menor porque muchas promociones aún no habían ido a parar
oficialmente a los bancos y no se habían podido vender a precios
asequibles como pasa ahora. “El proceso hasta que las viviendas están
inscritas a nombre de la entidad financiera es largo,”, resume el
responsable de Bonnín Sansó.
Si bien en los últimos meses el
ritmo de ventas de viviendas -básicamente las que son propiedad de
bancos-, se ha acelerado, Joan Torres pronostica que también habrá
aumentado el número de viviendas vacías precisamente por la lentitud del
proceso que permite que las entidades sean las titulares formales de
las promociones que han ido a la quiebra. Así, el agente inmobiliario
vaticina que “lo más probable es que el número de viviendas que se
adjudiquen los bancos sea mayor que el volumen de pisos vacíos que se
puedan vender”.
Mientras el stock de viviendas vacías
aumenta, en la última década el número de segundas residencias ha
descendido de manera notable. En concreto, se han perdido casi 1.400
viviendas utilizadas como segunda residencia, un 12 por ciento. El
descenso se produce en Ciutadella, Maó, Alaior, Es Castell y Ferreries.
En cambio, en Es Mercadal y sobre todo en Sant Lluís, se ha registrado
un incremento.
Especialmente remarcable es el caso de este
último municipio, Sant Lluís, donde el número de segundas residencias
prácticamente se ha duplicado en diez años. Sobre esta situación, Joan
Torres explica que “la costa sur de Menorca tiene un gran atractivo, y
cada vez más la gente valora la proximidad con los pueblos, con el
Aeropuerto o con Maó”.
Así, el agente inmobiliario destaca que la
adquisición de estas segundas viviendas muchas veces se contempla como
una inversión, y el inmueble se destina al alquiler. Y para esta opción,
la cercanía con la costa pero a la vez con el pueblo, la ciudad y los
servicios como el Aeropuerto suponen un plus importante para estas
residencias, según recoge el diario 'Menorca'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario